Quien ríe el viernes llora el domingo…
El hombre que nace ciego nunca conocerá la oscuridad…
Nuestras experiencias se dan por contraste de opuestos, conocemos lo barato porque conocemos lo caro, el vencedor y el vencido, frío-caliente, amor-odio.
No conoces la oscuridad si no has conocido la luz.
El contraste por opuestos es el modo en que representamos nuestra experiencia. Este mecanismo natural de nuestro cerebro posiblemente reside en el principio de la homoestasis.
El cuerpo y el cerebro buscan restablecer, a través de procesos que parecen antagonistas, el equilibrio entre las fuerzas nerviosas de nuestro sistema simpático y parasimpático.
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La física de nuestras ondas cerebrales demuestran que a cada pico le corresponde un valle, esto ilustra en parte el principio del equilibrio o homeostasis, en el cual se contraponen fuerzas opuestas para lograr el equilibrio de nuestro sistema nervioso. También, por su puesto, esto repercute en nuestra mente, este mismo principio crea la experiencia en base al contraste de opuestos. Barato-caro, amor-odio, vencidos y vencedores… Cuál es el opuesto de nuestro momento actual? Playa, reunión, parrilla? Próximamente les estaremos compartiendo un estudio del impacto emocional de la presente situación mundial.